Con la llegada del buen tiempo y días cada vez más largos, hacemos un mayor uso de las terrazas, balcones o jardines de nuestros hogares con el objetivo de disfrutar del sol por el día y de una agradable temperatura por la noche.
Los espacios exteriores han cobrado una gran importancia, especialmente desde el confinamiento, mostrándose como una vía de escape que ofrece una mayor sensación de libertad y nos permite disfrutar del aire libre sin necesidad de salir de casa.
Esto ha hecho que cada vez sean más las personas que optan por instalar tarima de madera exterior en las terrazas de sus apartamentos de verano, dada la comodidad y el estilo que proporciona este tipo de suelo, que es capaz de transformar por completo la decoración, con un plus de confortabilidad.
Si tú también estás valorando esta posibilidad, en MónParquet te contamos todo lo que debes saber acerca de las tarimas de madera exterior, mostrándote las principales características de este tipo de suelo, las principales ventajas que ofrece y los cuidados que debes tener en cuenta para que se mantenga en perfectas condiciones.
¿Qué es la tarima de madera exterior?
La tarima de madera exterior está fabricada con materiales altamente resistentes a la intemperie que mantienen la madera protegida de las condiciones climatológicas del exterior, como la lluvia o el polvo y, además, precisan muy poco mantenimiento.
La mayoría de tarimas para exteriores contienen aceite en la savia, lo que les aporta un plus de resistencia, estando fabricadas con iroco, ipe, cumarú, teka y otras maderas de origen tropical que son altamente resistentes a los agentes externos como la humedad.
Se caracterizan por ser tarimas para exterior fabricadas con madera 100% natural, lo que hace que tengan una mayor durabilidad que las tarimas sintéticas y un acabado de mayor calidad.
Ventajas de instalar una tarima exterior de madera en tu terraza este verano
Durabilidad y mantenimiento
Una de las principales ventajas es que las tarimas de madera para exterior son duraderas y precisan muy poco mantenimiento, soportando a la perfección las condiciones climatológicas. De hecho, son muchas las personas que optan por no aplicar ningún tratamiento a lo largo de toda la vida útil de la madera, dejando que luzca su color natural a medida que va evolucionando con el paso del tiempo.
Cálida y versátil
Este tipo de maderas son versátiles, adaptándose a la perfección a cualquier espacio y estilo, tanto rústico como moderno, proporcionando un toque de elegancia y originalidad a la decoración. El suelo pasará a ser uno de los elementos protagonistas de tu terraza y, además, proporcionará un toque de calidez muy agradable y confortable.
Beneficioso para la salud y para el medio ambiente
Está demostrado que los suelos de madera son beneficiosos para la salud, ya que sus propiedades aumentan la calidez y la confortabilidad del espacio, lo que favorecerá la tranquilidad y la calma, siendo una alternativa muy eficaz para combatir los altos niveles de estrés.
Así mismo, la madera natural es un material totalmente respetuoso con el medio ambiente, 100% reciclable, libre de elementos sintéticos como la resina o los tintes que contienen las tarimas de composite.
¿Un consejo? Opta por tarimas de madera que cuenten con el certificado FSC, que garantizará que las maderas se han extraído mediante un proceso sostenible con los árboles en el que no se ha producida la tala de forma ilegal.
Cómo mantener las tarimas de madera exterior en buen estado
Aunque precisan muy poco cuidado, al estar expuestas al sol, la lluvia, el viento y otros agentes atmosféricos, las tarimas de madera exterior sí necesitan un mantenimiento mínimo a lo largo del año, de hecho, os recomendamos:
- Aplicar un tratamiento a comienzo de la primavera y del otoño, con el objetivo de recuperarla y paliar los posibles daños que haya podido sufrir durante el invierno y el verano.
- Realizar una limpieza profunda al final de cada estación, con el objetivo de eliminar toda la suciedad que haya podido ir acumulando. El primer paso debería ser barrer la superficie con una escoba de cerdas suaves y posteriormente, aspirar a máxima potencia.
- Tras haber eliminado toda la suciedad, friega la tarima con una mezcla de agua muy caliente y vinagre, con la fregona perfectamente escurrida para no empapar la madera. Es importante utilizar agua caliente para que se seque más rápidamente.
- Barrer la tarima al menos una vez a la semana para evitar que acumule excesiva suciedad que después sería más difícil de eliminar, así como para que muestre su mejor imagen. Así mismo, si llueve, sería recomendable que secases la superficie cuanto antes.
- Una vez hecha la limpieza, tienes que hidratar la madera para evitar la deshidratación, que es uno de los problemas más habituales entre las tarimas exteriores, aumentando el riesgo de que se agriete. Para ello, aplica un aceite hidratante específico para tarimas de exterior, preferiblemente dos capas.
- Para combatir los posibles rayones, también es recomendable calzar los muebles que tengas en la terraza, lo que evitará que pueda estropearse al moverlos.
A todo esto hay que sumarle la importancia de instalar la tarima exterior correctamente, especialmente si es necesario nivelar el suelo, ya que si se comete algún error durante la instalación, es probable que se estropee antes de tiempo o que el resultado no sea el esperado.
Una alternativa cada vez más demandada al césped o a las baldosas, en el showroom de MónParquet tenemos una gran variedad de suelos de madera para exterior, que podrás verlos, tocarlos e incluso comprobar como quedan una vez instalados.
Si estás interesado, ven a visitarnos a nuestra tienda de parquet en Valencia, donde te ofreceremos un completo asesoramiento y resolveremos cualquier duda que puedas tener.